jueves, 17 de enero de 2013

A Freud who is a fraid.

Yo detendre tu latir. Y no te va a gustar.
Estas tan lleno de vida y algun dia te alcanzaré.
Y me ves todos los días al anochecer del alma.
Soy cadenas. Soy querer borrar.
Soy volver a recordar. Soy volver a llorar.
Soy el camino increíble de la traición.

Lo que amaste hoy te deja.
Lo que deseaste hoy te llena la boca de amargura.
Y aquel que todos odiamos pero nadie conoce,
En locura que no crea, sino que pierde control
rie poderosamente en un estruendo de tu frustración.

Todas las mujeres odiaran algun dia Disney.
Todos los hombres odiaran algun dia el porno.
Yo reire en mi trono. Bebere de la copa.
El trono sobre el hoyo negro.
Donde mi risa no se logra escuchar y es absorbida también.

Voy a prender tu cigarro, mi niña nerviosa.
Voy a ser tu excusa de auto-destrucción.
Te quitare la expectativa de todo.
Clavaré estacas en tu espalda, y de ellos hilos a mi control.
Cuando desees saltar por la ventana, sere gravedad.
Seré inconciencia, seré falta de sensación.
Adormecimiento y eterna condena.
Tu demonio.
Tu insomnio.
Mi reencarnación.

El campanazo de eterna duración.
El tetragramaton hecho ilustración.
El mismo disco rayado en la misma canción.
Todas las radios con la misma emisión.
La encarnación de la nada. Del Paraiso y del Infierno, la línea de separación.

miércoles, 9 de enero de 2013

To i-solate.

Este reloj sin manillas. Conectado a tubos siempre a punto de explotar.
Limpia tu cabeza antes de terminar. Limpia el suelo. Limpia las murallas.
Limpia ese cuchillo. Lava tu plato al final de almorzar.
Vamos con otro dia de rutina. Un Láudano que no llegará.
Otra historia no. Otra excusa si. Todo sin ninguna necesidad.
Asi que dime que será.
De una espera en la niebla, al lado de la acera.
En cientas de estaciones de buses, en silencio. En Sovngarde.
En cartas impacientes con destinatarios que hoy no existen.
En fotografías borrosas que no te dejen continuar.
En medio de la estampida en que toros matan y embisten.
Sin piedad a nada, aunque no creas que existen.
Ese estómago de elefante que sigues llenando con alpiste.
Será que nos prohibimos todo.
Nos prohibimos sol al otro día.
Entre nosotros asesinos del odio.
Sueldo del que no desea alegrar.

lunes, 7 de enero de 2013

Picara Picarona

Puedo recordar como me trataste de flaite 
desde tu trono de paja y barro. 
Y te pusiste los audifonos 
pa seguir siendo feminista y escuchar Daddy Yanqui. 
Vuelve la hipster arrepentida... con la mirada tierna... 
el hocico partido... y el dildo entre las piernas.

Puedo recordar como vibré con esa letra.
Puedo recordar cuando decías que me amabas.
Puedo inventar mas juegos de palabras.

Me acuerdo cuando me miraste raro
cuando puse esa cumbia antigua que hablaba de amor.
Y me dijiste chulo por "cumbia", y por "antigua" me dijiste anciano.
Y yo te dije que tu eras la mayor de edad.
Y yo te dije que nunca leias hasta el final.
Y tu silencio durará una eternidad.